Artículo original
Asterixis and dysarthria-clumsy hand originated of lacunar infarction: A series of six cases. Asterixis y disartria-mano torpe originado a partir de los infartos lacunares: Una serie de seis casos
Autor: Juan Montalvo-Herdoíza, Daiane Bittencourt-Fraga, Gilberto Vizcaíno, Aline SiteneskiRev. Ecuat. Neurol. VOL 30 Nº3, 2021
Asterixis and dysarthria-clumsy hand are uncommon neurological signs following to movement disorders after a stroke, clinically are classified as a part of lacunar infarction and most of the cases resolved spontaneously within ten days to one month. The aim of this study was to describe the clinical characteristics of six patients with lacunar infarction and mild motor symptoms of dysarthria and asterixis with no signs of dementia. All patients had as comorbidities hypertension and/or type 2 diabetes. In conclusion, it is important due to the transience of the abnormal neurological movements, the promptly recognition of the characteristic clinical presentation and confirmation of the diagnosis with noninvasive studies. The patients should be treated to prevent recurrent stroke with more severe consequences.
La asterixis y la disartria-mano torpe son signos neurológicos poco frecuentes que pertenecen a los trastornos del movimiento después de un accidente cerebrovascular. Clínicamente ellos son clasificados como parte del infarto lacunar y la mayoría de los casos se resuelven espontáneamente en un periodo entre 10 semanas y un mes. El objetivo de este estudio fue reportar seis casos de pacientes masculinos con infarto lacunar y describir los síntomas, localización y tamaño de las lesiones. Se describen casos de infarto lacunar y síntomas motores leves (disartria y asterixis) sin ningún indicio de demencia. En conclusión, nuestros casos presentan movimientos neurológicos anormales como asterixis y disartria-mano torpe en pacientes con hipertensión y / o diabetes mellitus tipo 2. Debido a la transitoriedad de esos movimientos, el diagnóstico en el tiempo adecuado es importante, a partir de eso los médicos pueden solicitar los exámenes de imagen, tratar al paciente y luego acompañarlo previniendo futuros ictus con consecuencias aún más graves. Así, estudios como el nuestro pueden contribuir al correcto diagnóstico de los infartos lacunares.